Pirlo rodeado de pelotas. En Italia si no la toca el no vale. |
Italia contra Inglaterra. Uno de esos partidos con mucha
tradición. Mucha historia. Uno de esos partidos que uno quiere ver. Siempre.
Si se repasan las formaciones de los equipos descubrimos que
Italia tiene a Gabriel Paletta (Argentino) y Mario Bolatelli (sí, nació en
Palermo, Italia, es hijo de inmigrantes de Ghana y tuvo que esperar hasta los
18 años para pedir la ciudadanía… ¡esto es una joda!). ¿Los piratas no eran los
ingleses?
Pero bueno, esto es fútbol. A llorar a la iglesia.
Dos estilos distintos.
Italia es tranquila, juega, toca. Todo lo hace lento. Muy
lento. Todo pasa por Pirlo, es el dueño de la pelota. Si no se la dan, ¡no
vale!
Inglaterra va. Saca la lanza y va. ¿Será qué Italia hace
todo tan lento que parece flojo? Los de Roy Hodgson son como un tiburón o como
los leones que tienen en el escudo: huelen sangre y van. ¡Y se mandan con todo!
Son directos. Van por las puntas. Son anchos. Llegan al fondo y meten el
centro. Juegan como jugo Inglaterra toda la vida.
A los 35 minutos la azzurra
hizo la del Barcelona. Corner a favor y no lo tiro, la jugo cortita. Se la
dieron a Pirlo que hizo dos genialidades en la misma jugada. La primera, fue
verlo a Claudio Marchisio que estaba solo afuera del área grande en el centro
del campo. La segunda fue meter un pase sin tocar la pelota, haciendo un amague
y dejándola correr.
Tipos como Andrea no tendrían que retirarse nunca. Hacen que
el fútbol sea lindo. ¡Muy lindo!
Pero bueno, la cosa es que Marchisio aprovecho y le pego
desde afuera por abajo entre las mil piernas que tapaban al arquero. Como si
fuera poco la puso al lado del palo.
Uno a cero. Italia es lenta pero te emperna.
Lo raro es que le duro poco. Dos minutos después Rooney
desbordo y metió un centro al segundo palo que Paletta no llego a cerrar. Sturridge
aprovecho la buena bocha que le metió el bueno de Wayne y la floja reacción del
central argentino nacionalizado y la mando adentro.
¡Uno a uno!
¡Uno a uno!
En Italia están analizando como fue que Gabriel Paletta
solicito y obtuvo la ciudadanía. Después del desempeño de hoy dicen que… ¡esta
flojo de papeles!
Se iba el primer tiempo y Mario Balotelli, Super Mario, no había
aparecido. Era una sombra (no piensen mal, no hagan chistes boludos que el
INADI puede estar leyendo y vamos todos en cana) del jugador que tiene un
promedio de gol superior a uno por partido. No la tocaba, no le llegaba. Parecía
que no había salido a la cancha.
Entonces le tiraron una pelota larga, la corrió y quedo muy
abierto sobre la izquierda. Dentro del área hizo desparramar a Hart que había
achicado. Quedo casi sobre la línea de fondo miro tranquilo y cuando parecía
que no tenia nada para hacer la pico, le tiro un sombrero, se la pincho.
¡Decile como quieras! Hizo una de un
partido de fútbol cinco con los pibes del barrio. El arquero ingles se quedo
parado mirando como la pelota le pasaba por arriba y lo salvo Jagielka, uno de
los centrales, que la saco de de cabeza sobre la línea.
Si la mete cerramos la cancha y no se usa nunca más en la
historia (igual, después del mundial ese estadio no se va a usar más, por eso
hay tanto lío en Brasil).
El segundo gol de los italianos fue una jugada de la premier
league. A los 50 minutos Candevra (que fue por la derecha todo el partido)
engancho y le metió un centro de zurda a la cabeza de Super Mario. Balotelli
todo lo que tuvo que hacer fue meterla adentro. Y lo hizo.
¡Dos a uno!
Entonces, Prandelli dijo: “A mi no me lo empatas de nuevo”.
Lo saco a Verrati y puso a Motta. ¿Sabes como se llama eso? Catenaccio. Cerró el partido. Bajo la
persiana. Se acabo. ¡Anda a embocarle uno!
Lo busco Inglaterra por todos lados. Quería ser ancho,
probar por el medio. Meterle un poco de velocidad. Pero era imposible. Los pross atacaban con 7 y los tanos
defendían con 9. Y, cuando la pelota la tenía Italia los ingleses no salían a
apurar, a tratar de recuperar rápido, a cortar. Entonces, los cuatro veces
campeones del mundo la metían en un freezer, la tenían, tocaban para el
costado. Pero no iban. Hacían pasar el tiempo con la pelota, la especialidad de
Pirlo.
A su ritmo, se lo llevo Italia. Hizo dos goles, lo supo
defender y tuvo la pelota. ¿Se necesita algo más para ganar?
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