La figura de la cancha: no se canso de ir por la banda y llego al gol de cabeza. |
Con
todos esos prejuicios encima fue más que Uruguay en el primer partido y le gano
tres a uno. Así y todo, nadie daba dos mangos por ellos. Las casas de apuestas
pagaban cinco con ochenta a uno por un triunfo de los ticos sobre Italia. ¡Cinco con ochenta a uno! ¿Entendes? Pones
uno y te llevas seis, ¡una locura! Y los tipos, contra todos los pronósticos, le
ganaron a Italia uno a cero.
Este
Costa Rica sabe lo que tiene que hacer, sabe a lo que juega. Se cuida, nadie
dice que no. Luis Pinto, el técnico de los ticos, armo un esquema bien
conservador: cinco en el fondo, cuatro en el medio y uno arriba. ¡Todos atrás y
Dios de nueve!
Con
sus armas y sus recursos hace las cosas bien. Porque los dos volantes por
afuera (Bolaños y Ruiz) manejan la pelota, hacen ancha la cancha y tienen mucho
criterio para pasar al ataque pero, cuando tienen que ponerse el overol y
trabajar, no se le caen los anillos a ninguno de los dos. Porque arriba lo
tiene a Campbell que aguanta, encara, gambetea y se tira atrás para jugar y
colaborar con la defensa. Porque el resto acompaña y deja todo. Se planta,
mete, raspa y corre. Es puro corazón este Costa Rirca.
Contra
Italia fueron mejores. Le jugaron de igual a igual y la azzurra nunca pudo con la seguridad defensiva y esa caradurez que
mostraron en ataque.
Italia
tuvo con Bolatelli las mejores situaciones del primer tiempo. Merece un párrafo
aparte la pelota de 70 metros que le pone Pirlo. No fue un pase, fue una obra
de arte. ¡Un poema!
Cuando
estaba terminando el primer tiempo, a los 44, de cabeza fue Ruiz el que se
encargo de abrir el marcador. Los costarricenses, que no tuvieron muchas
situaciones, fueron más eficaces.
¿Habrán apostado por ellos que festejan tanto? Pagaban 6 a 1. |
Esto
es fútbol. Costa Rica llego al mundial como la cenicienta y hoy quedaron como únicos
líderes del Grupo D, se clasificaron a Octavos de Final, le sacaron el pasaje
de vuelta a casa a Inglaterra y complicaron a Italia y Uruguay (definen entre
ellos el segundo puesto de la zona). Hicieron todo junto: el mismo día, a la misma
hora y en el mismo lugar.
Ya
esta, ¡táchame la doble!
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