¿Por qué cinco defensores? ¿Por qué tanto miedo? ¿Por qué Sibarita es tan rica? |
Pero en fin, el primer partido como el último,
creo yo, que hay que ganarlo como sea, Argentina tiene el 50% de la clasificación en el bolsillo.
Lo que no entiendo es la forma, me pregunto y
trazo una analogía con el caso de ayer… imaginate domingo, calculemos mediodía,
desde la cama empezas a abrir los ojos y ni bien ingresa un poquito de luz a través
de tus retinas, tu cabeza estalla… la comparsa ganadora del carnaval de Rio
comienza a danzar y en ese momento te preguntas: ¿Por qué se me ocurrió tomar
cerveza, si yo sé que me hace mal? Si siempre tomo fernet y me levanto bien, ¿Por
qué esta vez tome cerveza? O, ¿no? ¿Cuantos nos hicimos esa pregunta alguna vez?...
Bueno, bien, alguien que me explique qué pasó por la cabeza de Sabella a la hora
de hacer el planteo táctico de ese primer tiempo. Ese sistema nos dejo a lo
largo de su mandato en la selección las derrotas contra Venezuela, dudas,
criticas a los jugadores y hasta puso en duda su continuidad, pero él siempre
digno, liderando un equipo que quiere ser protagonista, se defiende y mal.
Llámenme loco, pero si queres ser
protagonista, ser ofensivo y tener la mentalidad de un equipo grande, hay que
tener más jugadores por delante de la pelota que por detrás. (Más líneas de
pase ofensivas)
Pero bueno, no todo fue tan malo, por lo
menos nuestro head coach se dio cuenta de su error y lo reconoció públicamente.
Creo que en definitiva este partido deja en
claro cuál es el sistema y cuáles los elementos que mejor se adaptan, pero no
mucho mas, entendiendo que lo mejor es ganar e ir de menor a mayor.
Párrafo aparte para quien es para mí, el
mejor de todos, Lionel Messi, este siempre juega bien, los que juegan mal son
sus compañeros… gol marca registrada, siempre busco, encarador y sobre todo en
el primer tiempo donde nunca encontró líneas de pase hacia el arco rival. Esta
clase de jugadores son tan ofensivos que prefieren encarar que jugar para atrás.
Yo brindo por ello.
Quedémonos con que sumamos de a tres, sin
lesionados ni expulsados y con la enseñanza de cuál es la forma de jugar.
Nico Levi – enviado especial - Kabúl
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