Se emociono, Luis, después del segundo. |
Se jugó el partido más
vibrante de esta segunda etapa, necesidades de ambos lados, pero un resultado
es el que valía. Ganar.
Los ingleses depositaban las
esperanzas en la calidad de Gerard y los goles, que nunca había convertido, de
Rooney.
Por el otro lado, en la vuelta
de Luis Suárez y el trabajo en conjunto que se había tomado licencia en la
primera fecha.
Partido opaco en juego, pero
con pierna fuerte de sobra. El cero a cero era lo que mejor le quedaba al
primer tiempo hasta por una contra manejada a la perfección que termina con una
genialidad de Cavani, quien coloca un pase como con la mano a la cabeza del
gran goleador uruguayo, Luis Suárez. No mucho más en la primera etapa, pitido
final, 1-0 y a preparar el segundo tiempo.
Arranca el segundo, Uruguay
desperdicia ocasiones que luego lo pondrían en apuros, tal es así, que el
equipo inglés, de la mano de su figura (quien rompería con esa maldición de no
poder convertir en mundiales) conseguiría el empate. Si el gran Rooney, el
joven de muchísima experiencia no había podido convertir jamás en una Copa del
Mundo.
El partido se achataba, los
orientales mostraban, como siempre, ese exceso envidiable de garra y huevo.
Partido cerrado, casi que ambos en ese momento hubiesen declaro tablas; hasta
que un despeje desgraciado (un defensor ingles trato de despejar con un
cabezazo, pero solo alcanzo a peinarla) que dejo habilitado a Luisito y este se
encargo de convertir el segundo para Uruguay y segundo en su cuenta personal.
Ahora sí, final del partido,
una victoria merecida que pone a Uruguay muy cerca de la segunda ronda.
Sobre el final y entre
lágrimas, la figura FIFA del partido conto que soñó con esos dos goles…
Luisito, querido, cuanta envidia… quien no soñó con poder hacerle dos goles a
Inglaterra, yo por lo menos sí.
Nico Levi (dando vueltas por el mundo)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario